Nuevo Laredo, Tamaulipas, 8 de septiembre de 2024 .— La administración de la alcaldesa Carmen Lilia Canturosas está a punto de cerrar su periodo de tres años, tiempo durante el cual se le ha criticado duramente por el manejo de los recursos públicos, especialmente en el ámbito de la obra pública. Con un presupuesto que supera los 5 mil millones de pesos, Canturosas prometió destinar gran parte de esos fondos a mejorar la infraestructura de Nuevo Laredo.
Sin embargo, a pesar de las promesas iniciales, muchas de las obras anunciadas en su primer periodo como presidenta municipal permanecen inconclusas. En 2024, se anunció la realización de más de cien proyectos de obra pública, pero gran parte de ellos serán heredados a la próxima administración, la cual, según pronósticos, volverá a estar encabezada por la misma alcaldesa. Este escenario ha generado dudas entre la ciudadanía, que se pregunta cómo es posible que, con un presupuesto millonario, las obras no se completen en tiempo y forma.
Se ha señalado que este sector ha sido utilizado como un medio para favorecer a ciertos grupos, permitiendo así el enriquecimiento de algunos actores cercanos a la administración.
Las acusaciones indican que la mayoría de los contratos de obra pública se otorgan a un grupo selecto de personas en la localidad, mientras que las licitaciones más importantes y lucrativas son dirigidas hacia constructores de Reynosa. Este tipo de prácticas ha generado un clima de desconfianza y denuncias sobre el posible uso indebido de los recursos públicos con fines personales.
La ineficiencia y los retrasos en la entrega de proyectos han dejado a muchos residentes de Nuevo Laredo frustrados. La administración de Canturosas ha sido señalada por priorizar sus intereses personales y económicos, en lugar de cumplir con las necesidades de la población. A pesar del volumen de recursos destinados a la infraestructura, las demoras y la falta de transparencia han sembrado una profunda desconfianza hacia su gestión.
Las preguntas continúan sin respuesta: ¿cómo es posible que, con tantos recursos a su disposición, las obras públicas queden a medio camino? La ciudadanía exige rendición de cuentas y respuestas claras sobre el futuro de su ciudad, aseguran que la obra pública se ha convertido en un negocio rentable para la administración actual, dejando a la población de Nuevo Laredo con una percepción de corrupción y mala gestión gubernamental.