Vecinos comentan que ya reportaron el problema al gobierno municipal, pero la alcaldesa Carmen Lilia Canturosas se niega a escucharlos.
-En la oficina de Regidores les dijeron que ya no hay dinero, porque el presupuesto de este año se cerró hace poco más de un mes.
Por: Manuel Madrid
Nuevo Laredo, Tamaulipas, 21 de septiembre .— A diferencia de todo lo que dijo hace unas semanas en su pasado informe de gobierno la alcaldesa Carmen Lilia Canturosas Villarreal, Nuevo Laredo muestra por todos los rumbos el deterioro de la infraestructura urbana, mediante escenas en donde las aguas negras brotan de las alcantarillas colapsadas formando ríos pestilentes, sin que ninguna dependencia se digne acudir a arreglarlas.
Un cuadro elocuente de lo anterior es el que existe por la calle Lisboa, entre Río Ganges hasta Río Éufrates, que se ha convertido en un foco de infección para las familias que viven en ese sector.
Son más de 300 metros en donde corren las aguas negras que pasan frente a una escuela primaria “Florencio Alvarado Martínez”, en donde los niños y las madres de familia tienen que soportar los olores nauseabundos, porque son aguas que emergen del drenaje sanitario.
En la esquina donde se ubica el plantel, el pavimento de concreto está totalmente destrozado y forma un enorme bache que lastima los neumáticos de los vehículos que por ahí circulan.
Los vecinos comentan que el problema no es reciente, ya tiene más de tres meses, y en un recorrido realizado en ese sector, se pudo constatar que efectivamente, en algunas partes el agua ya formó lama verdosa en donde se estanca.
La situación ya es intolerante, sobre todo porque la Lisboa es la calle que las familias utilizan para llevar a sus niños a la escuela y necesariamente tienen que pasar por ahí y percibir todos los días ese ambiente fétido.
Comentan que ya han reportado el problema a la Presidencia Municipal, pero la alcaldesa Carmen Lilia Canturosas no ha querido escucharlos.
Han recurrido a la oficina de Regidores, en donde les dicen que no hay dinero para reparar las fugas porque ya cerraron el presupuesto desde hace más de un mes.
Hace unas semanas, la alcaldesa rindió su informe de gobierno, en donde reportó que en la ciudad se han invertido millones de pesos, pero fue un informe de falacias porque lo más seguro es que esos millones hayan ido a parar a las cuentas bancarias de los funcionarios públicos, debido a que no se ven reflejados en la infraestructura urbana.
Es indignante que este gobierno municipal morenista no tenga cuadrillas de trabajadores que supervisen este tipo de problemas en las colonias, porque, así como está la Voluntad 4, existen otros sectores con el mismo problema y el gobierno municipal no tiene para cuándo responder.
Es lamentable que el gobierno de Carmen Lilia se haya caracterizado estos tres años como una administración indolente con los ciudadanos; deja que los colonos sufran este tipo de problemática mientras ella vive en Laredo, Texas, en la comodidad del aire acondicionado.
Una escena que se vive diariamente en esta frontera.