Nuevo Laredo, Tamaulipas, 04 de septiembre de 2024.— A pesar de las afirmaciones del Gobierno Municipal de Carmen Lilia Canturosas sobre una inversión de 1,400 millones de pesos en obras públicas, la realidad en las calles de Nuevo Laredo cuenta una historia muy diferente.
La semana pasada, un socavón emergió en la colonia Hidalgo, cayendo las llantas traseras de un camión repartidor de refrescos. Este lunes 2 de septiembre, otro socavón ha surgido en pleno sector centro, en la intersección de la avenida Guerrero y la calle Washington, resaltando la desconexión entre la retórica oficial y las necesidades reales de la ciudad.
En el punto crítico de la avenida Guerrero, un pequeño cono naranja ha sido colocado para alertar a los ciudadanos del nuevo hundimiento. Sin embargo, al examinar de cerca el socavón, se puede observar que la delgada capa de asfalto parece estar en el aire, sostenida solo por un delgado tramo de pavimento que podría ceder bajo el peso de los vehículos. Las grietas visibles en el pavimento advierten del peligro inminente, abarcando casi la mitad de la vía principal.
Según reportes locales, la administración actual ha registrado más de 200 socavones desde su inicio, evidenciando una infraestructura pública gravemente comprometida. Este problema no es aislado: en junio pasado, otro socavón en la calle 15 de Septiembre casi causó una tragedia cuando una camioneta con un anciano a bordo fue tragada por el hueco, afortunadamente sin víctimas fatales. El incidente en la colonia Hidalgo y el reciente hundimiento en el centro de la ciudad subrayan una creciente preocupación por la seguridad vial.
A medida que se pronostican lluvias para esta semana, la posibilidad de nuevas inundaciones y el consiguiente deterioro del pavimento podrían agravar aún más la situación, generando más socavones y poniendo en riesgo la seguridad de los ciudadanos.
La brecha entre las prometidas inversiones millonarias y la infraestructura deteriorada destaca la necesidad urgente de una revisión y mejora en la gestión de los recursos públicos y en la ejecución de proyectos esenciales para la comunidad.
La administración de Carmen Lilia Canturosas enfrenta un desafío creciente para cerrar la brecha entre sus promesas de desarrollo y la realidad cotidiana que viven los residentes de Nuevo Laredo, quienes claman por soluciones efectivas y una infraestructura más segura.